La Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la actualización de las clasificaciones de sillas de ruedas, ortesis y ortoprótesis especiales. Desde la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (Sermef), especialidad médica cuya razón de ser son las personas con discapacidad, creemos que supone un avance con respecto a los catálogos en vigor en las distintas comunidades autónomas.
El nuevo catálogo posiciona a las sillas de ruedas en el lugar que se merecen, pasando a ser consideradas como algo más que un sistema de transporte y poniendo en valor la verdadera utilidad terapéutica que supone una correcta sedestación de los pacientes con discapacidad grave. El amplio abanico de posibilidades de adaptación a las necesidades del paciente, junto al reconocimiento del valor aportado por el técnico ortopédico en los distintos grados de adaptación de la silla, supondrán un avance considerable en la atención a las personas con movilidad reducida.
Desde la Sermef defendemos que la adaptación de los productos de ortopedia a las personas con discapacidad funcional es un proceso complejo que requiere de profundos conocimientos que permitan alcanzar el objetivo terapéutico que nos planteamos para la máxima recuperación funcional del paciente.
- “La adaptación de los productos de ortopedia a personas con discapacidad funcional es un proceso complejo que requiere de profundos conocimientos”
Una buena sedestación en una silla de ruedas es un acto terapéutico crucial. El trabajo coordinado entre el médico especialista en Medicina Física y Rehabilitación y el técnico ortopédico aseguran que dicho objetivo terapéutico sea alcanzado.
- “El dispositivo ortoprotésico debe conseguir un fin terapéutico, permitiendo la máxima reintegración a las actividades habituales de las personas”
Desde Sermef propusimos la inclusión de vehículos tipo scooter para pacientes con capacidad de deambulación reducida, limitada a interiores o escasos metros, pero que en exteriores es imposible o muy limitada por motivos de seguridad. Con la posibilidad de incluir estos vehículos (normalmente más económicos que sillas de ruedas a motor) se podría alcanzar una integración plena en la sociedad de estas personas.
- “La Sermef ofrece su mano al Ministerio para lograr que la prestación ortoprotésica avance hacia la personalización basada en la evidencia”
Reintegración del paciente
La importancia de disponer de un catálogo amplio y adecuado de prestaciones ortoprotésicas permite al médico rehabilitador en colaboración con el técnico ortoprotésico restaurar la función perdida por el paciente (deambulación, manipulación, actividades de la vida diaria, etc…) con el objetivo de reintegrar al paciente a su entorno para un disfrute pleno de actividades habituales, incluso las deportivas. Este último aspecto no se recoge en los catálogos actuales y nadie duda de que en la sociedad española actual realizar deporte de manera habitual es una actividad que debe ser reintegrada a los pacientes con discapacidad.
En este sentido, desde al Sociedad Española de rehabilitación y Medicina Física ponemos de manifiesto la necesidad de actualizar los catálogos de prestaciones ortoprotésicas desde la perspectiva de que el dispositivo debe conseguir un fin terapéutico, permitiendo la máxima reintegración a las actividades habituales de las personas.
No sólo se deben dar pasos en el aspecto de movilidad, como hasta ahora, hay que dar un paso firme y decidido en otras áreas como en la prestación de prótesis para amputados de miembros inferiores, adecuando la posibilidad de prescripción a las necesidades inherentes del paciente, e incluyendo por ejemplo prótesis de baño, y en casos seleccionados, prótesis con fines deportivos, y como no podía ser de otra manera, cuidando la calidad estética de los productos acorde al siglo XXI en el que vivimos.
Posiblemente debamos evolucionar el concepto de prestación basada en un diagnóstico hacia prestación basada en un análisis individualizado de la restricción de función y de actividades, y en la búsqueda de una respuesta terapéutica personalizada. Explicado de otra manera, un amputado joven debe poder optar no sólo por una prótesis para caminar, sino, tras un análisis de sus posibilidades, por una prótesis que le permita una vida deportiva, mientras que en un amputado mayor esa situación no se va a plantear por lo general. No hace falta explicar los beneficios en salud que aporta el deporte habitual.
Solamente nos queda la esperanza de que los productos que se incluyan como prescribibles dentro del nuevo catálogo sean de la calidad técnica adecuada y no se plantee el nuevo catálogo con carácter de “ajuste presupuestario”, ya que una calidad adecuada redunda en una mayor durabilidad de los productos y una garantía en salud para las personas con movilidad reducida.
La Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física, como sociedad científica, desea ofrecer al Ministerio de Sanidad su mano tendida para conseguir que la prestación ortoprotésica avance hacia a una personalización de la prestación, basada en la evidencia científica y con el objetivo de optimizar los recursos que empleamos.
Fuente: DiarioMedico.com. Por Rogelio del Pino. Miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física.