El nuevo director del Imserso (dependiente del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social), Manuel Martínez, se comprometió el pasado martes a que antes de que termine 2019 estarán listos los reales decretos que regularán la figura del asistente personal y el servicio de la teleasistencia avanzada, aspectos ambos recogidos en la cartera de servicios de la Ley de Dependencia de 2006 que aún no se habían desarrollado.
Así lo aseguró Martínez a Servimedia tras la apertura de la presentación del Manual para la formación del Asistente Personal elaborado por la Plataforma Representativa Estatal de Personas con Discapacidad Física (Predif), dentro de los trabajos impulsados por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi).
Según Martínez, “urge aprobar una regulación estatal” en ambos casos, pues actualmente existe mucha disparidad entre territorios. Por ello, se comprometió a que este año estarán listas las normas que persigue impulsar el Gobierno central (probablemente dos reales decretos), para que a partir de ellas las comunidades autónomas desarrollen su reglamento.
A su juicio, esta regulación “es realmente urgente”, pues su desarrollo está pendiente desde que se aprobó la ley y son dos prestaciones muy demandadas por el sector. La teleasistencia avanzada forma parte de lo que la ley considera prestaciones servicio, mientras que la figura del teleasistente está contemplada dentro de las prestaciones económicas, ya que se trata de una aportación económica a las personas usuarias del sistema para contratar a dichos asistentes.
Sin embargo, “existen ciertas diferencias entre comunidades autónomas a la hora de definir quiénes pueden ser contratados como asistentes personales”, quiénes tendrían derecho a la prestación y cómo se llevaría ésta a cabo. Las principales divergencias tienen que ver con la cuantía económica, los perfiles de los posibles usuarios de esta figura y la formación requerida.
En este último punto, “hay algunas comunidades más exigentes que piden incluso FP y otras que van más en el modelo de 50 horas formativas que propone el Cermi”, explicó Martínez, que añadió que, en cualquier caso, “existe un ánimo de consenso entre todas”.
Fuente: SID. Imagen: Wikipedia.